jueves, 11 de diciembre de 2008

Cuánto hay que perder, cuánto más hay que perder? (06/12/08)

Necesito que me escuches, porque estoy llorando…
Esta lágrima que cae sobre el piano, está pidiendo lo mismo que mis manos…

Yo no soy un conglomerado de canciones y penas, no soporto ser el alimento de ambiciones ajenas...
Y tuve mi nombre, ya no sé dónde.

Cuánto hay que perder, cuánto más hay que perder?

Necesito creer, sino me muero.

No hay comentarios: